Descripción
Me gustan las fiestas de pueblo.
El vino peleón. Las luces baratas. La música que suena por los mismos altavoces desde hace diez años.
Hay olor a azúcar quemado, a calor viejo. A cuerpos que sudan aunque haga frío.
Me siento bien ahí. Invisible entre la gente. Libre sin que nadie me mire.
Me gusta la estética cutre. La decadencia de todo eso que no intenta ser perfecto.
Lo disfruto, aunque también me dé un poco de pena.
Como si todos estuviésemos bailando dentro de una piscina vacía.
Y nos diera igual.